PREPARÁNDOSE PARA SER PADRES
capitulo I
EN BUSCA DEL EMBARAZO
La decisión de ser padres no es fácil y una vez que se ha tomado surgen INTERROGANTES.
Vida saludable, revisiones médicas y PACIENCIA son algunas de las claves.
- Una cuestión importante: ¿ESTAMOS PREPARADOS?
A partir del momento en que una pareja decide tener un hijo aparecen una serie de dudas relativas a la preparación física y emocional de los futuros padres. Tener un hijo implica una serie de cambios y en cierta manera obliga a adquirir unos hábitos nuevos y a abandonar otros, incluso antes de la fecundación.
EMOCIONALMENTE los futuros padres empezarán a experimentar reacciones y cambios importantes en su vida. Tomar conciencia de la nueva situación y saber cúal es su función no es una tarea fácil. Los especialistas recomiendan paciencia y ser consultados, pues pueden ser de gran ayuda.
EN MANOS DEL EXPERTO. Acudir al especialista algunos meses antes de concebir un hijo permite aclarar muchas dudas y prevenir riesgos innecesarios para todos.EN EL PLANO FÍSICO llevar una vida saludable con una alimentación equilabrada y abandonar los hábitos que puedan resultar perjudicales para el feto como son el tabaco y el alcohol, así como evitar el estrés y el consumo de ciertos medicamentos es lo más recomendable. También se aconseja que el obstetra o ginecólogo realice una revisión pregestacional, imprescindibles para prevenir y tratar problemas de salud que podrían afectar el embarazo. Los expertos apuntan que tan importante es cuidarse y seguir un control médico y ginecológico antes como durante el embarazo.
La edad de la mujer en su contra
La edad de la mujer juega un papel muy importante en el embarazo ya que con el paso del tiempo las probabilidades disminuyen. Estadísticamente, a partir de los 40 años el índice de esterilidad es muy elevado y a este hay que sumar las posibilidades de aborto, que también aumentan. Ello es debido, por un lado, a que la mujer mantiene un número fijo de óvulos y si estos tienen 40 años no fecundarán con la misma facilidad que los de una mujer joven. Po otro lado, a partir de una edad tienen lugar más ciclos sin ovulación y con más frecuencia se producen embriones anormales que dan lugar a fallos en la implantación.
LLEVAR UNA VIDA SALUDABLE NO ESTÁ DE MÁS: Mantener un buen estado de salud es bueno tanto para la madre como para el futuro bebé. Por ello es aconsejable llevar una dieta sana y mantener el peso ideal, ya que un exceso de libras no impide quedarse embarazada, pero sí comporta riesgos durante la gestación. Se deben evitar el estrés, la ansiedad, el tabaco y algunos fármacos y reducir el consumo de cafeína y alcohol, puesto que, además de disminuir la fertilidad, pueden perjudicar la salud del futuro bebé.
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